Hay muchas cosas que diferencian al Vodafone Paredes de Coura del resto de festivales veraniegos: su magnífico emplazamiento, al lado de un río y rodeado de árboles frondosos; la ubicación de los escenarios, situados al final de suaves laderas, permitiendo a todos los asistentes disfrutar de las evoluciones de sus bandas favoritas sin necesidad de estirar el cuello o ponerse de puntillas: pero sobre todo, la sensación de que en él los artistas disfrutan tanto o más que los miles de fans que congregan. Grupos como Pulp, Arcade Fire, Pixies, Placebo y un largo etcétera han tocado en el festival por bastante menos de su caché habitual, simplemente por el placer de vivir la experiencia. Y no es infrecuente ver cómo los artistas se muestran impresionados al pisar su escenario principal, como le ocurrió a Dave Grohl, líder de Foo Fighters, en la edición de 2005, justo antes de su actuación. Con una sonrisa dibujada en la cara y visiblemente emocionado, confesaba que era el sitio mas increíble en el que había estado nunca.

En esta edición del 2014, el público que se acerque hasta la playa fluvial de Tabuão para disfrutar del festival, pequeño en tamaño pero enorme en calidad, podrá escuchar a bandas como Beirut, James Blake (ganador del Mercury Prize en el 2013 por su segundo álbum «Overgrown»), Janelle Monáe, Franz Ferdinand, CHVURCHES, Cut Copy, The Dodos o Black Lips, entre otros.
En un mundo en el que la oferta musical es cada vez mayor y en el que el acceso a esa música se ha simplificado de forma sustancial, permitiendo a miles de fans escuchar a sus bandas favoritas desde sus teléfonos o tablets,  es mas importante que nunca reivindicar la música en directo. No hay nada que se pueda comparar a la emoción del directo, nada que pueda igualarse a la sensación de escuchar canciones increíbles rodeado de miles de personas que saltan y aplauden y gritan al mismo tiempo que tú.

By Alejandra A.