Ellos, además de ser altos, guapos y fuertes, son algo así como la reserva espiritual del pop en Occidente. En el norte de Europa (muy al norte), allí donde antes habitaban vikingos, la electrónica y el pop se han fusionado para darnos este año uno de los mejores álbumes en lo que va de curso, un trabajo firmado por el excéntrico y simpático productor, Todd Terje.
Nacido en una pequeña localidad de Noruega cercana a Oslo, Todd Terje Olsen derrocha humor y simpatía en este primer álbum, colección en buena parte de muchos de sus singles y remezclas sacadas tiempo atrás. It’s Album Time, así se llama este largo, nos pone en viaje hacia algo conocido (el pop) mediante bases electrónicas y pequeños coletazos de sonidos techno de aquellos maravillosos años 90. Todo ello, marcado con un toque naive, primaveral, elegante.
Hasta ahora, Todd Terje sólo era un conocido productor de música electrónica en su país y su repercusión se limitaba a las pistas de baile de los clubs allí frecuentados. Pero con este primer LP, todo ha cambiado; festivales que se pelean por él y un nombre que empieza a sonar en el boca a boca de los más diestros y los menos, del panorama independiente.
Pese a comenzar en su juventud a estudiar clases de piano, pronto dejó tal tediosa empresa para comenzar a indagar en el mundo del house y el techno desde un punto de vista mucho más informal, una afición cualquiera («For most of my childhood I saw it as something ironic. I saw it as a ‘Haha’ thing«)
Pasaron los años y Terje encontró la necesidad de unirse al mundo de la música de alguna manera. Metiendo la cabeza poco a poco, tocando las teclas necesarias, consiguió empezar a pinchar en algunos de los más reconocidos clubs de Oslo. Una vez allí, quiso ir un paso más allá. Pese al clasicismo de la música disco que solía reinar en dichos clubs nocturnos, Terje comenzó a editar esos mismos trabajos con un toque personal («I started doing edits because I wanted to sound unique… Everyone wanted to say they were eclectic, but really they were just playing the same stuff«)
Algunas de sus primeras remezclas y ediciones, introduciendo bases y efectos vocales, fueron el «Superstition» de Stevie Wonder o el «Love is The Drug» de Roxy Music.
Luego llegaron las producciones propias con sintetizadores y singles como «Eurodans«, «Snooze for Love«, «Strandbar» o la genial y cuasimágica, «Inspector Norse«. Para la polémica más reciente, su versión y remix del «Johnny and Mary» de Robert Palmer junto al legendario músico británico Bryan Ferry («We tried to do it in a different way, of course. He’s just a wonderful guy — a really talented musician«, comentaba el propio Ferry). Y para el cierre perfecto de un álbum grandilocuente por su natural pegada, canciones como «Delorean Dynamite», «Oh Joy«o «Swing Star». Un producto redondo, lo mires por donde lo mires.
Luego llegaron las producciones propias con sintetizadores y singles como «Eurodans«, «Snooze for Love«, «Strandbar» o la genial y cuasimágica, «Inspector Norse«. Para la polémica más reciente, su versión y remix del «Johnny and Mary» de Robert Palmer junto al legendario músico británico Bryan Ferry («We tried to do it in a different way, of course. He’s just a wonderful guy — a really talented musician«, comentaba el propio Ferry). Y para el cierre perfecto de un álbum grandilocuente por su natural pegada, canciones como «Delorean Dynamite», «Oh Joy«o «Swing Star». Un producto redondo, lo mires por donde lo mires.
+info: http://toddterje.com/
twitter: @JRGE09 / @LONGBRIT