Diciembre es, por excelencia, el mes de las cenas. Ya sean familiares, de empresa, de amigos o románticas, durante las próximas semanas, nuestras agendas echan humo y nuestra vida social vive su momento álgido. Y como colofón a una gran cena, no hay nada mejor que disfrutar de una buena copa. Si eres de los que creen que el gin tonic es la bebida de moda, estás muuuy equivocado. Eso es porque no has probado el whisky con ginger ale. Para degustarlo, te proponemos nada menos que uno de los mejores afterwork de la capital: Casa Mono, donde también podrás disfrutar de excelentes gin tonics.
En el número 37 de la calle Tutor, en pleno barrio de Argüelles, se encuentra este exclusivo local que nada tiene que envidiar a su homónimo neoyokino. Un sitio con encanto, donde prolongar la sobremesa será de obligado cumplimiento. Decorado por el afamado interiorista Lázaro Rosa-Violán (premio AD al interiorista del año), su estilo se orienta hacia el clásico renovado, mezclando la madera con el hierro y aderezándolo con toques vintage (como los carteles de cine antiguo que lucen sus paredes) y con el color verde como gran protagonista.
El whisky con ginger ale es su bebida estrella. El ginger ale es un refresco de jengibre que se empezó a comercializar en los pubs ingleses en el siglo XIX para reducir el sabor de algunas bebidas alcohólicas. Debe su nombre a la característica planta (ginger). En 1890 surgió el “longdrink”, una mezcla sin alcohol con sólo ginger ale, hielo y cáscara de lima. Más tarde, en 1910 se añadiría el whisky y se le llamaría Horse´s Neck (cuello de caballo). Al servirlo se agitaría como el cuello de un caballo, de ahí su nombre. Su “perfect serve”: Jameson Irish Whisky, ginger ale y lima. Si no eres de whisky, dale una oportunidad, porque la combinación con el ginger ale y la cáscara de lima le otorga un sabor único y diferente y lo conviertn en una bebida sofisticada.
Además de copas y cenas, en Casa Mono también puedes organizar cualquier tipo de evento. El local cuenta con cinco ambientes diferentes: la cocktelería, la barra, el restaurante, la terraza o el privado. Si todavía no has encontrado un buen sitio para celebrar esa cena o evento que te trae de cabeza, en Long-Brit te recomendamos Casa Mono con los ojos cerrados. Pásate tú mismo y que no te lo cuenten!
Calle Tutor, 37 (Madrid)
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