Nos conocimos en Madrid, allá por el 2010. Recuerdo su primer concierto en una sala del paseo de Eduardo Dato con un cariño especial. Siempre que recibo noticias suyas, me agrada verles tan ilusionados y con nuevos proyectos bajo el brazo. Jakob, Stefan, Elias y Dominik son Purple Souls, una de las bandas autríacas con más proyección de los últimos años. Han trabajado duro en ello y poco a poco el esfuerzo va dando sus frutos. Teloneros de Crystal Fighters, French Films o Awolnation entre otros, acaban de encerrarse nueve meses en Viena inmersos en la grabación del que será su segundo álbum: «Babylon».
Me cuenta Jakob que uno de sus grandes retos ha sido grabar en el estudio Sterling Sound de Nueva York donde han tenido la oportunidad de trabajar con Ted Jensen, productor de bandas como Coldplay, Arcade Fire, Kings of Leon o Muse. Para ellos ha sido como una especie de «locura», como él mismo admite, pues significa trabajar con la persona que ha producido además los discos de algunos de sus ídolos de juventud, como U2, The Eagles, Green Day o Pixies.
Siempre han huido de etiquetas. Prefieren hacer música pop, simple y llanamente. Aunque Babylon, el primer single homónimo de su nueva criatura, es una evolución a un sonido más puro, «orgánico», que el que definía su anterior trabajo. La canción habla sobre la búsqueda de ese lugar en el que uno se siente feliz. Ese que siempre has anhelado y en el que te gustaría quedarte para siempre. Puede ser cualquier lugar en el mundo, desde una caótica ciudad o una isla remota.
En esencia, Purple siguen jugando entre dos mundos, entre el indie y el pop. Con ese rollo oscuro que nos recuerda a las bases de Editors o Interpol y que tanto nos gusta. Mientras esperamos el nuevo álbum, os dejamos con el vídeo de Babylon, uno de los cinco que han grabado en NY el pasado año. No les pierdan de vista!
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