Si eres uno de los afortunados que asistirán a la próxima edición del Primavera Sound de Barcelona, presta mucha atención al artista que hoy te presentamos.

De origen californiano, Nick Waterhouse ha llegado para rescatar el sonido R&B, guitarra en mano y al estilo de un joven gentleman del siglo XXI. Elegancia y clase a raudales para demostrar que interpretar con gusto géneros de antaño es una apuesta arriesgada, pero en muchas ocasiones totalmente acertada.


«Time’s All Gone» (2012) fue su carta de presentación. Un álbum que fácilmente podríamos encontrar en el baúl de los recuerdos de nuestros abuelos, donde el señor Waterhouse interpreta enérgicamente temas tan genuinos como Indian Love Call o I Can Only Give You Everything al más puro estilo Sharon Jones, en versión masculina.

Ritmos frescos y pegadizos que nos invitan a mover el esqueleto, donde la parte instrumental corre a cargo de los saxos y los potentes metales y el resto lo pone la vibrante voz del joven Nick.

Cogió su primera guitarra a los 12 años y empezó a tocar bajo las influencias de Van Morrison o John Lee Hooker. A finales de 2010 grabó su primer single, Some Place, donde rescata el soul de los añorados 60s y hasta se permite el lujo de aderezarlo con toques de surf y garage. Un revival en toda regla de la Old School


Steve Crooper.

Por un momento viajamos al pasado. Cerramos los ojos y nos imaginamos que nos encontramos en una oscura sala de Detroit engalanada con luces de neón y apoyados en una barra de terciopelo a punto de pedir un Bourbon mientras un coro de ángeles femeninas acompaña a  Sam Cooke, Ray Charles con los Atlantic Records o el genial Steve Crooper, de la Memphis Stax, considerado como uno de los mejores guitarristas de soul de todos los tiempos. Pero no. Abrimos los ojos y ahí está él, un veinteañero con camisa y corbata con ganas de comerse el mundo bocado a bocado.

Pero su secreto no ha sido otro que, como el mismo cuenta, creer en él, en lo que hace y si a eso le añadimos un alto porcentaje de personalidad arrolladora, el éxito está más que garantizado.
Nick y su banda pisarán las tablas del escenario Ray-Ban el próximo viernes 23 de mayo en el Primavera Sound de Barcelona. Sin duda, una propuesta diferente para un festival marcado por la electrónica.