Con influencias de artistas como Bon Iver, Sufjan Stevens, Bob Dylan, Tracy Chapman o Bruce Springsteen era evidente que «1.000 Years» sería un gran álbum. No sabemos si fueron 1.000 los días que tardó en componer este disco, pero lo que sí sabemos es que el 2017 fue un año clave para Allman Brown (no confundir con Allman Brothers Band) autor de uno de los discos más finos de folk de la última hornada de artistas que brillan con estilo propio dentro del género.

Melodías que rebosan destreza y sensibilidad, más propias de un artista experimentado que de un principiante con su primer álbum debut bajo el brazo, como es el caso de Brown, y que vaticinan una futura trayectoria musical con expectativas muy elevadas.

En 1.000 Years encontramos temas tan finos como Sons and Daughters (incluido en un capítulo de la exitosa serie The Good Doctor), Ancient Light, Palms, Rivers o Shape of You. Temas moldeados con una gran emoción y con carisma que nos envuelven en una atmósfera íntima, sin caer en una lírica remilgada o indigesta.

El pasado año Brown estuvo presentando su disco en Madrid y Barcelona como telenero de Palace y actualmente se encuentra de gira por Europa. Una gira que le llevará por países como Francia, Suiza, Alemania, los Países Bajos y no sabremos si finalmente también volverá por España, donde le esperamos con los brazos abiertos.